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Carrito

La potencia transformadora de una mente abierta

El 20 de Mayo el sol ingresó al signo mutable de aire Géminis. Desde Marzo, el Sol ha estado transitando por los primeros signos del zodiaco. Estos signos, nos hablan de nuestra individualidad, cómo nos expresamos, qué tenemos para compartir con otros, qué pensamos y creemos acerca del mundo, etc. Es decir, hemos estado profundizando en nuestra propia identidad, y comenzamos a comprender como nuestra mente puede ser una aliada o una enemiga en nuestros procesos de aprendizaje actuales. Se abre así un periodo donde el foco de atención se dirige hacia nuestra mente, con sus pensamientos y múltiples voces. Especialmente, a la manera en que se expresa y comunica a los demás lo que imaginamos, conocemos e incluso negamos de nosotros mismos.

El elemento de este mes, y de esta Luna Nueva es el aire. El aire representa ese espacio donde la comunicación es posible. Es el lenguaje y su complejidad, es el pensamiento en su rizomática extensión y todos los puentes e interrelaciones entre los seres vivos. Es el enredo que todos llevamos dentro, pero que compartimos con otros inevitablemente.

Géminis es de vital importancia en la configuración de nuestra mirada particular del mundo, pues es donde aprendemos a ser el Ser social que somos. Cuando se dice que este signo o la casa que rige, simboliza a los hermanos, vecinos y viajes cortos, es porque ligamos esta vibración a nuestras relaciones cercanas, esas que suponen un lenguaje y un marco de entendimiento común. Entonces, Géminis representa la primera socialización en todo sentido, desde el uso del lenguaje hasta la conformación de hábitos de pensamiento. Es aquí donde nacen las creencias que nos acompañarán toda la vida, si no las ponemos en duda en algún momento.

Así como en el plano de lo mental hay múltiples manifestaciones de lo que entendemos como realidad, en todo orden de cosas es posible ver que existen distintas capas o niveles. En el caso del eje Géminis/Sagitario, hay diferentes niveles de comprensión. Así, Sagitario, su opuesto complementario, es el signo dónde vamos poniendo en cuestión eso que aprendemos en Géminis, en la medida que abrimos nuestro campo de entendimiento y nos encontramos con otras formas de socialización.

Este eje, nos habla de alteridad, esto es, el reconocimiento de ese otrx tan diferente, pero a la vez tan igual a mí. Reconocer al otrx supone ponerse en su lugar y comprender las diferencias respecto a mí, como nuevos aspectos de la propia realidad, y no como un enemigo o contrario.
Complementariamente, Sagitario o la casa nueve, surgen como el ámbito donde la vida me invita a expandir mis explicaciones y abrirme a otras formas de entendimiento. Es por eso que tradicionalmente se sitúan aquí los viajes al extranjero o los estudios superiores, los sistemas filosóficos, entre otros. Porque refiere a todo lo que nos aleja de una perspectiva unívoca y generalizable, y nos permite expandir los propios horizontes, ampliando al Yo y creando un “Nosotros” más amplio y diverso.

Venus Retro y el retorno del Nodo Norte

Este año, el mes Géminis tiene una cualidad especial, pues también están presentes en el signo, Venus (que no retrogradaba aquí desde el 2012) y el Nodo Norte (última vez, entre 2001-2003). Esta singular combinación, nos propone un año para centrarnos en los aspectos comunicacionales de nuestras relaciones, tomar consciencia de nuestros diálogos internos y revisar prejuicios, creencias y la “narrativa” desde donde comunicamos lo que somos.

Para darle más valor a nuestros pensamientos, ideas y la manera en que estamos expresándolas, ante todo, precisamos poner más atención a cómo nos hablamos y pensamos de nosotros mismxs. Generalmente pasamos por alto cuántas veces al día nos tratamos con dureza o intolerancia, nos juzgamos por lo que hacemos y lo que no. Luego, cuando entramos en relaciones, operamos de la misma forma. Por eso es importante comenzar a pensarnos y hablarnos con más paciencia, amor, calidez, y sobre todo autovaloración, cualidades Taurinas y Cancerianas que debemos integrar para entrar más preparadxs a este nuevo ciclo. Con Venus retro, el impulso es a la reflexión y revisión profunda antes de comenzar un nuevo ciclo de aprendizaje. Estas energías disponibles nos invitan a atrevernos a Ser y DejarSer a otros con más libertad y comprensión.

Este es un tiempo que nos invita a observar en qué tipo de actividades invertimos nuestra energía mental ¿qué tipo de información estoy consumiendo? ¿Pongo en cuestión lo que leo y comentan otros? ¿Qué tipo de valores hay detrás de lo que creo cierto?

En esta línea, otro aspecto relevante de este ciclo son las cuadraturas de Mercurio, Venus y eventualmente el Sol, a Neptuno en Piscis. Este aspecto de tensión entre ellos (al momento de la Luna Nueva es exacto), puede significar la necesidad de poner consciencia y claridad a temas afectivos. La energía de Neptuno puede ser muy poderosa en cuanto a la posibilidad de conexión con planos superiores de consciencia que nos brinda, pero que fácilmente puede generar confusión, ilusión y excesiva fantasía. Más aún durante este tiempo, donde el estrés y la incertidumbre es mayor que en otros periodos. Recordemos que bajo estas tensiones, nada es lo que parece, sólo la observación detenida del propio diálogo interno, nos podrá orientar durante el tiempo que dure este tránsito.

Por otro lado, junto con antiguas estructuras sociales y económicas, caen también estructuras cognitivas, miradas miopes e ideas absolutistas. Estamos frente a la emergencia de nuevas y más flexibles maneras de comprender nuestra mente y lo interconectados que estamos.

Es un tiempo para reconocernos y experimentarnos en nuestra multidimensionalidad. En este ciclo habita un gran cambio colectivo, que nos propone ampliar nuestras fronteras mentales y emocionales. Nos invita a probarnos en nuevas situaciones y a reconocer los sesgos en los cuales nos enredamos. Un tiempo para darnos cuenta cuan apegados hemos estado al mismo tipo de racionalidad y cómo esto nos limita para ver otros caminos que resuenan más con lo que queremos desarrollar en nosotrxs y compartir con los demás.

Les deseo una potente Luna Nueva y un potente ciclo nodal en Géminis!

Mónica. S.G

.: AstrologíaConectiva :.